Energías renovables, fotovoltaica y la aerotermia: definición, características y cómo funcionan

La era digital ha desarrollado sistemas de energía para el consumo eléctrico a partir de  recursos naturales, gratuitos e inagotables. En este artículo vamos a desglosar las principales funciones de la aerotermia, en un intento por conocer sus características y cómo funciona su actividad. Por otro lado, la fotovoltaica o la instalación de placas solares, que deriva del sistema aerotérmico, explicaremos su funcionamiento y sus beneficios para el medio ambiente. También hablaremos de las energías renovables, y de cómo suponen un recurso que abarata las facturas de luz en los hogares, además de crear una conciencia común medioambiental para reducir las emisiones de gases y partículas que sean nocivas para el planeta.

La aerotermia, un sistema de energía eléctrica que funciona a base de recursos naturales

La aerotermia aterriza como una tecnología capaz de aprovechar la energía térmica del aire, un recurso inagotable de la naturaleza y que se encuentra completamente libre de dióxido de carbono (CO2), para climatizar el entorno. El cometido de este montaje lo convierten en una fuente ecológica con un impacto ambiental muy bajo.

Su instalación se compone de varias bombonas de calor que se sitúan en el exterior de la vivienda para captar de una forma óptima el aire que transcurre. Este espacio abierto puede ser un patio, una terraza o incluso el tejado. Dispone de un refrigerante mediante el cual consigue recoger toda esa energía que va generando en forma de gas, para así transportar mejor la sustancia mediante la condensación por tuberías de cobre.

Así es como la aerotermia consigue obtener calor y agua caliente para el consumo del hogar, aunque también permite la reversión de los flujos para producir aire frío, por lo que este sistema puede emplearse tanto para bajar como para subir la temperatura.

Cuando genera combustible, la aerotermia lo obtiene mediante una disposición más compleja que la de cualquier otra energía que en el mercado actual exista. Un ejemplo de ello es lo explicado anteriormente. Su sistema permite graduar y dispensar la temperatura determinada de forma gradual, de tal manera que así es capaz de conservar la inercia térmica del espacio que esté calentando o enfriando. En este sentido, se podría decir que la aerotermia posee un seguro control para aclimatar espacios.

Este aspecto positivo es peculiar en el sistema de la aerotermia porque asegura la estabilidad en entornos que se encuentran bajo climas estables y predecibles para que, así, el usuario no tenga que depender en ningún momento de tener que ajustar la temperatura, puesto que se realiza de manera automática.

  • Ventajas de la aerotermia

Entre sus principales aspectos positivos, destacan:

  • Es un sistema eficaz que consume muy poca energía.
  • Esta característica ayuda a que los clientes ahorren en la factura eléctrica.
  • En este sentido, se trata de una inversión que, a largo plazo, irá devolviendo todo el dinero que el usuario gastó para adquirirlo.
  • El 70% de la energía que obtiene es del aire, por lo que consume una fuente de recursos natural que es renovable.
  • Su instalación es sencilla y rápida.

Las instalaciones de placas fotovoltaicas, una forma de generar energía a través de la radiación del Sol

Los paneles solares son una forma de autoconsumo. Es decir, se trata de un sistema de obtención de la energía que recoge la radiación del Sol para transformarlo en consumo propio. Es importante dejar claro que no dependen de la luz solar, sino de su emisión.

El autoconsumo, produce una energía limpia, pues a través de la radiación solar se obtiene un consumo incluso para días de lluvia o de mal tiempo. Sigue un procedimiento bastante sencillo y su instalación puede realizarse sin necesidad de un técnico profesional, aunque lo mejor es dejarse asesorar por un profesional para asegurar un correcto funcionamiento en la instalación.

En este sentido, su instalación precisa de un espacio exterior y aislado, es decir, que no sea un espacio común en el que la gente suele hacer vida, para montar de manera adecuada las placas solares, pues estas son las encargadas de recoger toda la radiación que llega del Sol. Su servicio procede, por lo tanto, de fuentes de energía renovables de energía, recursos que no se agotan y que son gratuitos en la naturaleza.

Esto, en consecuencia, lo que genera es un ahorro en los bolsillos de los clientes. Pese a que la instalación inicial puede llegar a costar un poco más que la red eléctrica convencional, pasa lo mismo que con la aerotermia: hay que verlo como una inversión inicial que luego se verá recuperada, ya que un 70% de toda la energía que capta procede del Sol y la restante de la electricidad.

Esto quiere decir que el usuario solo paga el 30% de todo lo que consume, lo que provoca que, a largo plazo, se logre una dependencia energética en el hogar, al no necesitar más la red de corriente habitual, además de un ahorro del 60% mensual en la factura de la luz.

Y lo mejor de este sistema es su practicidad, pues como no depende de ningún tipo de cableado dependiente de la red eléctrica convencional, en el caso de que ya no se quiera depender de las placas solares, siempre se puede volver a dar de alta el servicio y restablecer la luz, el gas y el agua como antes.

Las energías renovables, una apuesta que se desarrolla en el presente para beneficiar el futuro

En los últimos años, el campo de las energías renovables se ha estudiado con detenimiento con el objetivo de poder emplearlas en sistemas que consigan una mejora en la calidad de vida de las personas. Con el objetivo de crear un planeta menos contaminado y responsabilizar a los individuos de esta crisis medioambiental, estas fuentes han marcado el avance clave en la era tecnológica del presente. El ser humano se ha dado cuenta de que los recursos y materiales, como por ejemplo el petróleo, se agotará en algún momento, de manera que es necesario que surjan alternativas para sustituirlas.